Nuestra tradición

Inspirado en la sabiduría de nuestros ancestros, José Antonio Zuñiga, un apasionado de la cultura herbolaria, estudió una receta milenaria en la que los curanderos ancestrales utilizaban el Ajolote, a partir de este conocimiento, ha creado una deliciosa fórmula herbal, sin recurrir al uso de este maravilloso animalito. Sin embargo, decidió mantener el nombre como un homenaje a esta tradición cultural mexicana.

Ajolo-cultura

El bienestar y el amor son fundamentales para cuidar la salud de nuestras familias. Por eso buscamos ser una herramienta confiable para que las familias mexicanas puedan velar por sus seres queridos con cariño, dedicación y seguridad.

La herbolaria milenaria es un pilar de la cultura, idiosincrasia y economía mexicana, por lo que promovemos y fomentamos el uso responsable de lo que nuestra tierra madre nos ofrece, así como el cuidado del medio ambiente que la cobija, todo esto lo logramos a través de nuestros procesos, programas y la comunicación que nos esforzamos por difundir.

Estamos comprometidos a hacer que nuestra fórmula sea accesible para todos los bolsillos, ya que creemos firmemente que todos merecemos disfrutar de los beneficios que la medicina alternativa mexicana tiene para ofrecer.

La herbolaria mexicana ha sido parte de nuestra historia ancestral, por lo que somos firmes defensores de su preservación y de desarrollar procesos que acerquen sus beneficios.

Ajolo-esencia

 La tradición herbal de Ajolotius sigue un recorrido artesanal desde el corazón de los cultivos mexicanos, pasando por procesos artesanales rigurosamente controlados para extraer las propiedades en su forma más pura y concentrada, posteriormente se envasa cuidadosamente para llegar a las manos de las familias mexicanas que con amor, cuidan de los suyos.

Josecito encarna la esencia herbal nacida del corazón de Ajolotius.

Con el compromiso de hacer realidad esta filosofía, se decidió dar vida a esta esencia herbal mediante la adopción de un ajolote, un gesto que se lleva a cabo en colaboración con el Instituto de Biología de la UNAM, a través de su programa “ADOPTAXOLOTE”, dedicado a la conservación del ajolote mexicano.

¡Te presentamos a Josecito, un intrépido explorador!